“¿Cómo alimentar a un gato doméstico?” es una pregunta que preocupa a muchos dueños de felinos. ¿Deberías adoptar exclusivamente una dieta basada en carne? ¿Agregar vegetales al plato de tu gato o recurrir a frutas y granos?
¿Cuántas veces al día debes alimentar a tu gato y cuáles son las porciones exactas? ¿Qué alimentos deben evitarse absolutamente para los gatos?
Frecuencia de las comidas, necesidades nutricionales, dieta ideal… Descubre nuestros consejos veterinarios para una nutrición que promueva el bienestar y la salud de tu pequeño felino.
¿Qué Comen los Gatos?
Para saber cómo alimentar a un gato doméstico, es esencial entender qué comen los gatos en la naturaleza.
Contrariamente a lo que se podría pensar, los gatos no son omnívoros como los perros, sino carnívoros estrictos.
Esto significa que su dieta está compuesta principalmente de carne (pequeñas presas: roedores, pájaros…) y productos de origen animal, con muy pocos o ningún alimento de origen vegetal.
Para alimentar adecuadamente a tu gato, manteniendo un desarrollo corporal óptimo y una salud normal, debes proporcionar una dieta suficientemente variada, pero principalmente compuesta de carne, grasas y pescado.
Sin embargo, ricos en fibra y vitaminas, algunos vegetales (por ejemplo, zanahorias) pueden complementar esta dieta carnívora, así como algunos granos (por ejemplo, batata), que son generosos en carbohidratos pero deben darse con moderación a tu gato.
Las Necesidades Nutricionales de los Gatos
Es imposible saber cómo alimentar a un gato sin entender sus necesidades nutricionales específicas.
Las necesidades nutricionales de un gato varían de un individuo a otro según su sexo, edad, metabolismo, estado de salud, estado reproductivo (castrado o no) y muchos otros factores externos como su estilo de vida. Esto se conoce como variabilidad individual.
Un gatito de cinco meses no necesitará la misma cantidad de nutrientes que un gato adulto, ni una gata embarazada recibirá las mismas proporciones que una hembra anciana que sufre de artritis o un tumor mamario.
También es diferente alimentar a un gato del campo, que tiene más oportunidades de actividad física corriendo y trepando fuera de casa, en comparación con un gato de interior que pasa la mayor parte del tiempo relajado en un cojín.
Las necesidades nutricionales de un gato incluyen:
- Proteínas: entre el 40 y el 80% de la dieta total. Las proteínas son los nutrientes más importantes para los gatos.
- Grasas: alrededor del 15 al 20%.
- Lípidos: mejoran la palatabilidad de los alimentos y proporcionan energía.
- Carbohidratos: El porcentaje de carbohidratos en la dieta de un gato debe ser bajo, del 3 al 8%, ya que su sistema digestivo los asimila menos efectivamente que, por ejemplo, un perro.
- Vitaminas: Los gatos necesitan vitaminas A, B, D, E, etc., que desempeñan papeles importantes en varios procesos metabólicos.
- Minerales: Incluyen fósforo y calcio, esenciales para la salud ósea y dental. Esta lista puede complementarse con magnesio y oligoelementos como hierro, selenio, cobre y zinc. Los minerales se obtienen de la carne, vegetales y frutas.
- Aminoácidos Esenciales: Principalmente arginina y taurina, presentes en la carne. Son necesarios para la síntesis de urea, la eliminación de amoníaco y ayudan a prevenir trastornos cardíacos y degeneración retiniana.
- Ácidos Grasos: Omega-3 y 6 son esenciales para los sistemas inmunológico, cardiovascular y nervioso, así como para la piel y el pelaje de los gatos. Los ácidos grasos se encuentran en los peces (por ejemplo, el salmón y su aceite) y los mariscos.
- Agua: Una buena dieta para gatos se complementa con agua limpia y fresca, a la que el animal debe tener siempre acceso.
¿Quieres saber cómo alimentar a un gato?
No dudes en consultar a un veterinario que pueda ayudarte a calcular las necesidades dietéticas específicas de tu compañero felino.
Al respetar las cantidades que ellos aconsejan, evitarás sobrealimentar a tu gato y ayudarás a mantener un peso corporal saludable.
Nota: Los gatos de cría requieren alimentos más calóricos que los gatos adultos castrados porque gastan más energía.
Generalmente, se considera que un gato adulto necesita una ingesta diaria de 40 a 50 gramos de alimento por kilogramo de peso corporal. Por ejemplo, si un gato pesa 4 kg, debe recibir entre 200 y 250 gramos de ración diaria.
¿Cuál es la Mejor Manera de Alimentar a un Gato?
La mejor manera de alimentar a un gato es alternar el tipo de alimento de alta calidad colocado en su plato. Esta alternancia se llama binutrición o alimentación mixta. Se basa en alimentos húmedos (paté de gato), alimentos secos (pienso de gato) y, a veces, comidas caseras.
La mejor manera de alimentar a un gato también considera dos elementos esenciales: la frecuencia de las comidas y los momentos apropiados para invitar a tu mascota a comer.
Estas consideraciones son cruciales, ya que ayudan a prevenir trastornos alimentarios y el síndrome de agresión felina. Son parte de la respuesta a la pregunta: ¿cómo alimentar a un gato?
¿Cuántas Veces al Día Debes Alimentar a un Gato?
No hay recomendaciones estrictas respecto a la frecuencia de las comidas para los gatos. Mientras algunos profesionales de la nutrición animal recomiendan dar a tu felino varias comidas ligeras a lo largo del día, otros sugieren que una comida por la mañana y otra por la noche es perfectamente adecuada.
Un estudio canadiense reciente reveló incluso que una sola porción diaria puede ser suficiente para satisfacer las necesidades energéticas de nuestros amigos peludos.
Lo que aconsejamos es considerar (1) la edad de tu gato y (2) sus preferencias.
- Edad del gato: ¿Tu gatito tiene menos de siete meses? Dale varias pequeñas comidas al día (mañana, mediodía, noche y antes de dormir). Esto apoya su rápido crecimiento y satisface sus necesidades aumentadas sin sobrecargar su pequeño estómago. Sin embargo, si tu gato tiene más de seis meses, reduce la frecuencia de las comidas a dos, generalmente por la mañana y por la noche. Esto se alinea con su ciclo natural de actividad y descanso, estimula la actividad y mantiene el metabolismo.
- Preferencias del gato: Algunos gatos son “picoteadores”. Prefieren comer ligeros y disfrutar lentamente de su ración diaria. Para estos gatos, es prudente dejar la comida disponible o dividirla en al menos tres porciones. Tener varios platos—colocados en diferentes ubicaciones alrededor de la casa—o un dispensador automático de pienso puede ser necesario para darle al gato acceso constante a la comida, controlando las cantidades consumidas.
Alimentar a los gatos domésticos no es excesivamente complicado, pero requiere un cierto nivel de implicación y responsabilidad por parte de los dueños de gatos que necesitan saber cómo alimentar a un gato.
¿Cuándo Alimentar a un Gato?
Como se mencionó anteriormente, puedes alimentar a tu gato por la mañana, alrededor de las 8 a.m., al mediodía, por la tarde, alrededor de las 5/6 p.m., y antes de dormir, alrededor de las 10 p.m., dependiendo de su edad y preferencias.
También puedes dejar la cantidad diaria de comida disponible, especialmente si muestra comportamiento de picoteo.
Nota: Los gatos son animales de rutina. Cualquier cambio en su rutina diaria a menudo causa estrés y ansiedad.
Aunque solo es una sugerencia, alimentar a un gato a horas fijas tiene muchas ventajas. Ayuda a evitar la ansiedad y el estrés relacionados con la comida. Esta rutina alimentaria también promueve una mejor digestión, ya que el estómago del gato se acostumbra a recibir comida en momentos específicos del día.
Sin embargo, si tienes horarios irregulares o pasas largas horas fuera de casa, evita establecer una rutina alimentaria que no puedas mantener y prefiere un enfoque de acceso libre a la comida.
¿Cuál es la Dieta Ideal para un Gato Doméstico?
Como carnívoros estrictos, los gatos domésticos dependen casi exclusivamente de la carne para su nutrición. Su dieta ideal es, por lo tanto, basada en carne.
Normalmente, esta dieta incluye alimentos húmedos, alimentos secos y, a veces, alimentos caseros.
Es común que los dueños de gatos alternen entre alimentos secos y húmedos, lo que es excelente, ya que promueve un mejor equilibrio nutricional.
Desde el punto de vista renal y urinario, la alimentación mixta también es ventajosa: alivia la función renal en gatos con insuficiencia renal y apoya a los gatos con condiciones urinarias, como cálculos urinarios.
¿No sabes qué alimentar a tu gato? Alterna estos dos tipos de alimentos.
Sin embargo, asegúrate de elegir productos de alta calidad específicamente formulados para gatos, asegurando que la carne esté listada como el ingrediente principal.
Para hacer esto, lee atentamente las etiquetas de los alimentos para gatos y evita productos con demasiados granos o demasiada sal.
Los alimentos húmedos y secos están disponibles en el mercado adaptados a diferentes perfiles felinos, como comida para gatitos, comida para gatos obesos y comida para gatos mayores.
¿Es Bueno Dar Paté a los Gatos?
El paté para gatos es un alimento rico en agua.
Debido a su contenido de humedad, es fácil de masticar y digerir para nuestros compañeros felinos y asegura la ingesta de agua, contribuyendo a su hidratación.
Además, este alimento húmedo es particularmente apetitoso, convirtiéndolo en uno de los mejores alimentos para estimular el apetito de nuestros pequeños felinos.
¿Es bueno dar paté a los gatos? La respuesta es sí.
El paté es una excelente comida para gatitos y gatos adultos. Ayuda a limitar el aumento de peso.
Sin embargo, ten en cuenta que el paté para gatos a menudo tiene una calidad nutricional inferior en comparación con el pienso, que incluye todos los nutrientes que el animal necesita y es más seguro desde el punto de vista higiénico.
Recomendamos elegir paté de alta calidad, sin granos, con bajo contenido de grasa y al menos un 10% de contenido de proteína.
Consejo: Si tu gato está constipado, dale paté. Si tiene diarrea crónica, dale pienso.
¿Qué Alimentos Están Prohibidos para los Gatos?
Algunos alimentos tóxicos o indigestibles para los gatos deben evitarse en su dieta.
Estos incluyen:
- Chocolate: La teobromina en el chocolate es peligrosa para los gatos. Este alcaloide del cacao puede causar varios síntomas, como vómitos, diarrea, temblores y, en casos extremos, ataque cardíaco.
- Frutas secas: Las frutas secas (por ejemplo, pasas) son perjudiciales para los gatos y pueden causar problemas renales.
- Cebollas, ajo, puerros: Comunes en la comida humana, estos aromáticos son altamente tóxicos para los gatos y pueden causar anemia al destruir los glóbulos rojos.
- Aguacate: El árbol del aguacate, incluida su corteza, fruta y hojas, es tóxico para los gatos.
- Sal: Los alimentos salados (por ejemplo, embutidos) deben evitarse para los gatos. El exceso de sal puede causar hipertensión o retención de agua.
- Pescado crudo: El pescado crudo puede estar contaminado con bacterias y causar intoxicación alimentaria en los gatos. Debe evitarse.
- Alcohol: El alcohol es peligroso para los gatos, incluso en pequeñas cantidades. Puede causar síntomas como vómitos, diarrea, letargo y, en casos graves, coma.
Al evitar estos alimentos, aseguras la seguridad y el bienestar de tu gato.
En conclusión, saber cómo alimentar a un gato implica entender su naturaleza carnívora, satisfacer sus necesidades nutricionales específicas, establecer una rutina alimentaria y elegir alimentos de alta calidad. Siguiendo estas pautas, puedes asegurar la salud y la felicidad de tu compañero felino.